Juventud Rebelde publicará hasta el 1ro. de junio, Día Internacional de la Infancia, una pequeña muestra de las cartas que han elaborado los pioneros, que condenan las nuevas afrentas del presidente George W. Bush

Juventud Rebelde.- En sus recientes palabras sobre Cuba, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush demostró, una vez más, su desconocimiento sobre la vida y obra de nuestro José Martí.
O no estudia nunca o se asesora mal. Eso, desde el punto de vista cultural, deja muy mal parado al mandatario de una nación. El error es mayor si se trata de hablar de la libertad, democracia, justicia social, mejoramiento humano y ética, asuntos de los cuales el pensamiento de José Martí es una fuente inagotable y siempre vigente.

Ya en el año 2001, los pioneros, con la participación de niños y niñas de todo el país, escribimos 150 000 cartas al presidente Bush con la intención de ayudarlo en su conocimiento sobre la vida y obra de nuestro Apóstol. Estamos convencidos de que una persona como él, por los intereses imperiales que representa no coincidirá nunca con nosotros cuando de hablar de los destinos de los pueblos se trata, pero lo que resulta inadmisible es la gran carga de ignorancia que tienen sus opiniones.

Parece que con las 150 000 cartas aramos en el mar pero no importa, reiteramos nuestra disposición de ser útiles, de acopiar paciencia una vez más y también, una vez más si es necesario, volver a explicar. Fidel, que es nuestro gran maestro y un ejemplo de nivel cultural y de persona informada, nos ha enseñado que los revolucionarios nunca se pueden cansar y que hay que vivir educando, sembrando ideas, exponiendo argumentos.

Estamos en disposición de hacer llegar al señor Bush una biografía de José Martí, el libro La Edad de Oro, así como los Cuadernos Martianos que con tanto amor y sabiduría compiló para los niños, adolescentes y jóvenes el maestro Cintio Vitier. También pudiera pensarse en hacerle llegar los tres tomos de las Obras Escogidas de Martí. Pensar en las Obras Completas sería pedir un esfuerzo más allá de las posibilidades de una persona que reconoce que no lee.

Sabemos que usted y nosotros no pensamos iguales. Pero, por favor, señor Presidente ¡lea, instrúyase, documéntese! antes de seguir hablando incoherencias y errores sobre una gigantesca personalidad histórica que dijo para su tiempo y todos los tiempos que «Ser culto es el único modo de ser libres».

Por la lamentable ignorancia demostrada hasta ahora, señor Bush, usted está muy lejos de ser libre aunque se pase el tiempo evocando la libertad.

Por eso, los pioneros cubanos que nos preparamos todos los días para seguir conquistando toda la justicia y libertad de nuestro pueblo, le pedimos al periódico Juventud Rebelde que publique hasta el 1ro. de junio, Día Internacional de la Infancia, una pequeña muestra de las cartas que hemos elaborado como condena a la tamaña afrenta de comparar al más digno representante de nuestro pueblo con cualquier persona que ni siquiera siente respeto por la colosal obra ética que ha construido y construye nuestro pueblo, bajo el cínico y genocida bloqueo a 90 millas del imperio yanqui.

Los pioneros cubanos