FakeNewsVsCuba.-  El reconocido humorista cubano llamado Juan Carlos Hernández, y que popularmente se le conoce como Juan Carlos “El Gordo” vuelve a ser víctima de discriminación y pensar diferente en “tierra de libertad”.

Resulta que escribió este miércoles, en su muro en Facebook, una denuncia contra quienes presionaron para cerrarle un programa de radio que tenía en Miami.

Su texto, refiere lo siguiente:

A todos mis amigos y también a mis pocos enemigos quiero contarles algo que me ha ocurrido:
Hace aproximadamente dos meses un amigo cubano radicado en Estados Unidos, específicamente en Tampa, se comunicó conmigo para emprender un proyecto de un programa de radio llamado La Hora del Gordo, un espacio de aproximadamente dos horas que se emitiría por la Ritmo 101.9 de Tampa y trataba sobre humor y música.

El programa comenzó a salir y tenía una audiencia que disfrutaba de esos minutos en que regalábamos amor y humor. Sin embargo, hoy se comunica este amigo para decirme que tenía que sacar el programa del aire por varias amenazas a él y a la emisora por tenerme allí de conductor, no como Juan Karlos el gordo que hace reír a la gente, sino como Juan Karlos alias “el Guerrero cubano”.

Todos deben imaginar de donde viene toda la maldad: del innombrable personaje al cual ni me interesa mencionar su nombre, volviendo a repetir que yo soy el Guerrero Cubano, cosa que nunca probó y me trajo múltiples preocupaciones relacionadas con mi integridad y la de mi familia.

¿Solo por tener una voz parecida,afirmas que soy el Guerrero Cubano ¿Hasta cuándo hay que aguantar la maldad de este tipo que difama de mí? y de muchos artistas cubanos ¿de qué libertad de expresión me hablan? ¿que aquí en Cuba no hay? Explícame entonces cómo ocurre esto, te pregunto: ¿la hay allí?

¿Hasta cuándo tenemos que aguantar todo los que nos dicen de cambios y de libertad de expresión aquí cuando allí no dejan que ni siquiera los artistas cubanos podamos regalar nuestro arte? Siempre me he dedicado a hacer humor, son 42 años de trabajo entregados al público, ¿por qué siguen presionando para que uno diga lo que ellos quieren? cuando allí ni tan siquiera dejan que nuestro arte llegue a muchos amigos que lo disfrutan.

Ojala pronto podamos continuar con ese proyecto para seguir llevando alegría a pesar de esta maldita epidemia. Tengo fe.