Regla Zulueta - Mujeres.- Un rasgo característico de Laura María Leandro Rivero es su locuacidad, por algo se convirtió en una líder del VIII Curso Nacional de Alta Tecnología en Rehabilitación en la Facultad Cubana de Medicina Física y Rehabilitación de Machurrucutu, en el municipio de Bauta, de la provincia de La Habana.
Es técnica de fisioterapia, en el Hospital Joaquín Albarrán, al que todos en la capital lo conocen como el Clínico de 26. Desde el primer momento me dice que con una alegría tremenda y con un compromiso mayor concluyó este mes de capacitación que contempló el uso de equipos láser escáner, de ducha y puntual, de alta frecuencia, ultrasonidos, electroterapia, así como aparatos de campos magnéticos, y para masajes eléctricos con la utilización de diferentes gamas de frecuencia.
Militante del Partido Comunista de Cuba, Laura María reconoce que estas cuatro semanas de intensa preparación le permitieron adiestrarse en la más moderna tecnología disponible en el mercado internacional y con ello desempeñarse mejor en Cuba y en el extranjero, pues domina técnicas que no todos sus homólogos en el mundo las conocen.
Explica que la población se debe sentir satisfecha y segura porque con este adiestramiento de todo el personal de los servicios rehabilitación en el país, está garantizada la atención primaria y la secundaria que es la que corresponde a los hospitales, los que en estos momentos en su gran mayoría están en una etapa de remodelación de sus instalaciones.
Laura María Leandro Rivero en el próximo curso escolar 2007-2008 se graduará como Licenciada en Terapia Física y Rehabilitación y pertenece a la facultad de Tecnología de la salud. Además es coordinadora del Movimiento de Vanguardia Estudiantil doctor Mario Muñoz Monroy.
Indago si antes de comenzar el entrenamiento en curso tenía el mismo criterio en cuanto al aprovechamiento del conocimiento de las disciplinas y expresa:
“El curso en esta Facultad Cubana de Medicina Física y Rehabilitación de Machurrucutu nos ha servido para solidarizarnos más y conocer a un grupo de rehabilitadores de las provincias de Ciudad de La Habana, La Habana y Matanzas.
“Es bueno destacar la labor de los profesores y profesoras, quienes con paciencia, constancia y perseverancia nos han trasladado sus conocimientos sin escatimar en horario e inclusive dedicaron tiempo de su descanso en el horario de la madrugada.
“Que la población conozca que próximamente llegarán a los policlínicos y hospitales todo este equipamiento y que los profesionales y técnicos en su gran mayoría están preparados para enfrentar la nueva tecnología.
“Con esta preparación estamos en condiciones de explotar adecuadamente los nuevos recursos y de dar un servicio de excelencia a la población que es el objetivo primordial de todos, en Cuba o en el extranjero”.