Canal Caribe.- Un editorial del diario Granma argumentó las razones por las cuales autoridades cubana denegaron el permiso a una marcha que consideran parte de Planes Desestabilizadores promovidos desde Estados Unidos contra Cuba. En el barrio de San Isidro en la Habana Vieja se reafirmó en acto de masas el compromiso patriótico de defender las conquistas de nuestro proceso social.
Cederistas habaneros patentizan mi razón es mi escudo
En el acto, los vecinos discutieron el editorial del órgano oficial del Comité Central del PCC, y rechazaron las acciones de los enemigos de la Revolución
Carlos Manuel Serpa - Tribuna de La Habana
Los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) en La Habana, desarrollan por estos días actos de reafirmación revolucionaria como parte del proceso político "Mi razón es mi escudo".
En los 15 municipios capitalinos, los integrantes de la mayor organización de masas del país, dan su respaldo incondicional al editorial del periódico Granma, que condena los intentos desestabilizadores contra la Revolución cubana por parte de mercenarios internos con el apoyo del gobierno de Estados Unidos.
En las zonas 36 y 74 del Consejo Popular San Isidro, en el municipio capitalino de La Habana Vieja, se efectuó uno de estos encuentros con la presencia del Héroe de la República de Cuba Gerardo Hernández Nordelo, integrante del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y del Consejo de Estado y Coordinador Nacional de los CDR.
En el acto, los vecinos discutieron el editorial del órgano oficial del Comité Central del PCC, y rechazaron las acciones de los enemigos de la Revolución.
"Los cederistas en los barrios expresan el compromiso de la organización con la Revolución, y no permitir en las calles el actuar de mercenarios y anexionistas", enfatizó Irina Serra Podio, coordinadora provincial de los CDR en La Habana.
Similares encuentros están previstos en los días venideros en los municipios de Cerro, San Miguel del Padrón, Playa, Centro Habana, Boyeros, La Lisa, Guanabacoa, La Habana del Este, Regla y Diez de Octubre, donde quedará evidenciado que los cederistas habaneros tienen millones de razones para defender el proceso revolucionario.
