Javier Francisco Domínguez - La Otra Versión / Cubainformación.- Cada vez se hace más frecuente la noticia de cubanos víctimas de la violencia en el sureño estado de La Florida. El nuevo caso es el del joven Yasnier López Débora, de 31 años que según las primeras versiones de los hechos murió tras recibir varias heridas de arma blanca propinadas presumiblemente por su compañero de casa en el noroeste de Miami.

La investigación se mantiene abierta mientras el asesino se encuentra prófugo. Según declararon algunos vecinos de la cuadra 10 del noroeste y la avenida 40 a cada rato allí se reunían varias personas y hacían fiestas. Por su parte la policía local ha solicitado ayuda de la comunidad para esclarecer lo ocurrido.

Laura Méndez, vecina de Yasnier declara que escuchó ruidos y golpes.

Este no es un suceso aislado. El caso de Yasnier ocurre a sólo días de que Etianna Planellas Arocha de 48 años perdiera la vida después de recibir 4 disparos por parte de un oficial que asegura haber sido apuntado por la víctima con un arma. Al decir de la madre de la fallecida no era necesario haberla ultimado, un disparo a las piernas o en otra parte del cuerpo hubiera neutralizado a su hija que padecía de enfermedades mentales y era conocida por la mayoría de los policías de Miami Shores, donde residían.

Visiblemente dolida, esta señora se pregunta ante los escasos  medios que cubrieron el hecho: “¿Qué vida puede tener una madre a la que le maten a su hijo? Si me hubieran escuchado cuando les grité que la pistola que portaba era de juguete no habría ocurrido esto pero no me escucharon y el oficial solo me decía que entrara para mi casa.”

Lo ocurrido con Etianna nos recuerda el asesinato el pasado 29 de enero del joven cubano Diosmani Ramos, de 23 años de edad. Él perdió la vida cuando elementos de la Border Patrol (Patrulla Fronteriza) le dispararan 5 veces al pecho. Un hecho catalogado por testigos y familiares como un abuso de poder por parte de las autoridades de la frontera puesto que al igual que el suceso narrado anteriormente no era necesario acabar con la vida del joven que solo portaba una piedra en sus manos.

Si bien estos sucesos que involucran a cubanos no han causado mucho revuelo en los medios de prensa locales, el asesinato de un turista  frente a su familia sí ha provocado que se tomen medidas por parte de las autoridades.

Diosmani Ramos, joven cubano asesinado por la policía de EE.UU.

El baleado fue Dustin Wakefield, de 21 años y residente en Colorado. Mientras cenaba el pasado 28 de agosto en la terraza deLa Cervecería, en Ocean Drive junto a su familia un desconocido se acercó y le disparó 3 veces. El asesino al parecer estaba drogado y salió del lugar festejando lo que había hecho. Según testigos su estado le impedía controlar su equilibrio al andar. Trabajadores del lugar aseguran que primero le apuntó al bebé de Dustin y este se interpuso entre el asesino y su hijo lo cual le costó la vida.

A raíz de este hecho el alcalde de Miami Beach, Dan Gelber, ordenó que la policía, junto con personal de Bomberos, estacionamientos, saneamiento y otros departamentos elaboren una estrategia unificada para lidiar con estos sucesos cada vez más frecuentes.

El Departamento de Policía reasignó a un promedio de 40 agentes al patrullaje de las calles de South Beach, para aumentar “visibilidad” no solo por las noches o los fines de semana, sino durante todo el día, subrayó el comunicado de la alcaldía.

El consumo de drogas unido a la facilidad de acceder a las armas de fuego en los Estados Unidos cada día deja más familias enlutadas, algo que parece no importar mientras la venta de artefactos de muerte siga siendo un negocio próspero.

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Javier Francisco Domínguez. Psicólogo, actor y locutor nacido en Cuba y comprometido con la verdad de los pueblos. Con aquellos que no tienen voz y cuyos intereses y necesidades rara vez se ven reflejados en los grandes medios de comunicación.