Gerardo Moyá Noguera*.- El hambre contra Cuba desde los tiempos de J.F. Kennedy es consecuencia, nada más y nada menos, que del criminal bloqueo existente hace más de 60 años. En 1992, cuando la economía cubana tocó suelo con la caída de la URSS, Bush aprobó la ley Torriccelli prohibiendo compras al exterior. En aquel entonces la CIA informó de que la escasez de alimentos y los problemas de su distribución han causado desnutrición y enfermedades en Cuba. ¡¡¡Qué gran mentira!!!
Cuba resiste y resistirá siempre contra este criminal bloqueo hasta el fin de los tiempos, es decir, hasta vencer y venceremos. Decir también que usar los alimentos como instrumento de coerción y ahogamiento del pueblo es una violación del derecho humanitario internacional y Europa y sus mandatarios nada dicen y hacen para acabar con estas violaciones humanitarias existentes. Recordemos que en 2018 el consejo de seguridad de la ONU (que no sirve para nada) aprobó una resolución, la 2417, que condena la privación de alimentos en situaciones de conflicto. Vean si no Rusia-Ucrania. Las guerras y conflictos no se solucionan aportando más armas (los occidentales incluída España saben mucho de esto) lo que les permite (a los imperialistas) aumentar la duración de la guerra. El gobierno de Sánchez (PSOE) sigue enviando armas y tanques precisamente cuando nosotros, los españoles, tenemos grandes deficiencias en servicios sociales básicos como sanidad, educación, vivienda, alimentación, etc. y el sr. Sánchez (PSOE) sigue de rodillas ante el imperio/EEUU y atacando a Cuba, cuando puede.
Presidente de la Casa de Amistad Baleares-Cuba
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