AIN.- José Luis Rodríguez, ministro de Economía y Planificación, afirmó en esta ciudad que Cuba está mejor preparada para afrontar los retos que impone un mundo convulso, al borde de la catástrofe económica y ecológica.
Al clausurar el acto nacional por el Día del Trabajador del sector, explicó que desde el 2004 la Isla experimenta crecimientos de su Producto Interno Bruto y este año debe de finalizar con un incremento de alrededor del 10 por ciento.
Habrá que enfrentar situaciones complejas -dijo- como son los precios cada vez más altos del petróleo, por lo que se requiere una estricta política de ahorro en el uso de combustibles, aunque reconoció lo avanzado al calor de la Revolución Energética.
Indicó que no existen soluciones mágicas, y es preciso apostar al trabajo sistemático, a la dedicación, la consolidación de todos los pasos para que no haya retrocesos.
Ejemplificó que hoy una tonelada de frijol colorado se llega a cotizar en el mercado mundial en mil 200 dólares, entre otras razones, por los cambios climáticos y así sucede con otros renglones.
En relación con la política de inversiones, señaló que la esfera productiva será privilegiada, continuará el fortalecimiento de la rama eléctrica, donde se materializan logros, y en el futuro deberán reducirse aún más las pérdidas por generación y distribución.
Resaltó la importancia de perfeccionar el sistema de transportación, incluidos los viales.
Se han dado pasos importantes -explicó- en la reducción del desbalance financiero interno, y abundó en toda la labor que se desarrolla con vistas a reducir las importaciones.
Identificó dos importantes momentos de reflexión este año: el debate del discurso del general de Ejército Raúl Castro el 26 de Julio último y la discusión con los trabajadores del plan y presupuesto de la economía, tipo de análisis al que el Comandante Ernesto Che Guevara concedió gran importancia.
El complejo escenario internacional -acotó- impone hoy un profundo conocimiento, calidad en el dominio de los temas económicos.
En 1979 se instituyó el 26 de noviembre como Día del Economista, en homenaje al Guerrillero Heroico, quien en esa fecha de 1959 fue nombrado presidente del Banco Nacional de Cuba.
