Lucilo Tejera Díaz - Foto: Rodolfo Blanco Cué - Camagüey, 15 jun (AIN) La cervecería Tínima, reconocida internacionalmente y enclavada en esta ciudad, emprendió inversiones que modernizarán el equipamiento e incrementarán la eficiencia de la industria.

Directivos de la planta informaron a la versión digital del semanario Adelante que a un costo de 50 mil dólares ya se ejecutaron labores en una de las líneas de embotellado, sobre todo con un nuevo rodamiento principal.

Antes de entrar en faenas más complejas, la fábrica asegura el funcionamiento en el período veraniego, cuando crece la demanda en Camagüey por los carnavales en junio, y luego en los meses de mediados de año por las vacaciones masivas de muchos trabajadores que aprovechan el receso escolar y disfrutan opciones recreativas.

Después se espera la llegada de piezas contratadas en Alemania para la reparación de máquinas y sistemas de áreas fundamentales, como la de envasado.

El equipamiento, cuyo precio supera el millón de dólares, evitará derrames de materia prima, mejorará el cierre y el nivel de llenado de las botellas, y contribuirá a disminuir las paradas por averías, señalaron los técnicos.

La Tínima, primera industria de su tipo construida en Cuba después del triunfo de la Revolución, distribuye maltas en todo el territorio nacional, suministra la mayoría de los caldos de cerveza a las otras plantas del país, y ha comercializado la bebida en Europa, Centroamérica y el Caribe.

Hace dos años la industria montó una lavadora de botellas más eficaz y productiva a la que existía hasta entonces, y puede higienizar 25 mil botellas por hora.

Tínima es una de las cinco marcas de cervezas de Cuba y se producen anualmente entre 40 mil y 50 mil hectolitros de la bebida, comercializada en botellas, toneles, a granel y en forma de caldo.

Esta fábrica la inauguró el líder histórico de la Revolución Cubana, Fidel Castro, el 24 de diciembre de 1985.