Susana Antón Rodríguez - Granma.- Una de las proyecciones es contar con una plataforma autónoma propia para el comercio electrónico en divisas, que conecte a proveedores nacionales e internacionales.

Potenciar el funcionamiento del Instituto Nacional de Actores Económicos –ya activo con la entrada en vigor del Decreto 108 esta semana– y su atención al sector cooperativo, así como diseñar e implementar un programa nacional de fortalecimiento y gestión de la innovación, son algunas de las premisas para el desarrollo de las cooperativas en el país.

Para su fomento, resulta necesario incluir sistemas de acciones de formación y transformación en materia de normas jurídicas y gestión cooperativa y avanzar, en la medida en que las condiciones económicas del país lo permitan, en la implementación de los imprescindibles esquemas de pago de financiamiento de divisas aprobados.

Esto surge de las proyecciones de la XV Convención Internacional de Cooperativismo Cooperat-2024, que concluyó este jueves, y que propone el diseño de una plataforma autónoma propia para el comercio electrónico en divisas que conecte a proveedores nacionales e internacionales de insumos, materias primas y equipos, con productores agropecuarios y sus necesidades.

El doctor en Ciencias Carlos Torres Páez, presidente del comité organizador y director del Centro de Estudios de Dirección, Desarrollo Local, Turismo y Cooperativismo de la Universidad de Pinar del Río, destacó que en materia de cooperativismo en el país resulta necesario valorar la inclusión de nuevas normas y procedimientos específicos, para renovar proyectos financieros para el desarrollo de las cooperativas y las empresas de la economía social.

Precisó la necesidad de potenciar la construcción de modelos de negocios flexibles y orientados hacia áreas productivas, mediante cadenas de valor agroalimentario que articulen a actores estatales, cooperativos y también privados, que puedan promover intercambios de conocimientos, asesorías y experiencia sobre buenas prácticas y visiones aprendidas; además de propiciar los incentivos financieros y no financieros, así como aquellos de carácter tributario para el desarrollo del sector cooperativo.

En su intervención, en la clausura de la cita, a la cual asistió el vice primer ministro de la República, Jorge Luis Tapia Fonseca, precisó que 11 universidades de la Isla presentaron 27 experiencias concretas de cómo la Educación Superior ha estado presente al lado del sector cooperativo cubano, al tiempo que se fomenta potenciar la modernización de proyectos de cooperación internacional.

Al respecto, señaló la disposición del sistema de Naciones Unidas, de varias embajadas en el país y de organizaciones de la cooperación internacional, de continuar acompañando el desarrollo del sector cooperativo y, sobre todo, la implementación de la Ley de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria y Nutricional en Cuba.

En el Congreso participaron 653 delegados e invitados; de ellos, 625 presenciales y 28 en la modalidad virtual, de unos 19 países, lo cual reflexiona sobre los múltiples criterios, concepciones de orden metodológicas, herramientas y experiencias de buenas prácticas que tuvieron lugar durante tres días en el Palacio de Convenciones de La Habana.