Las campesinas han transitado con firmeza el camino que se abrió con esas decisiones históricas. Analfabetas ayer, dependientes y sujetas a un destino incierto, fueron de las primeras en iniciar, con el triunfo de la Revolución y el impulso de la Federación, un cambio radical que transformaría para siempre sus vidas. Hoy son mujeres instruidas, a la par de sus congéneres de la ciudad, presentes en las más disímiles labores, activas en cada batalla, firmes en la defensa de la Patria.
La Federación de Mujeres Cubanas siente legítimo orgullo por el desempeño cotidiano de nuestras campesinas, ocupadas en las estratégicas labores agropecuarias, técnicas, ingenieras, dirigentes cooperativistas, integradas a los Programas de la Revolución, patriotas, comprometidas en la batalla cotidiana por la justicia y la igualdad.
La FMC, que tiene en la más alta estima al campesinado de nuestro país, saluda hoy a esta decisiva fuerza de la Revolución y patentiza, de modo especial, su reconocimiento a las mujeres, segura de que contribuirán cada vez más a incrementar la producción de alimentos, a labrar nuevos triunfos en el futuro, fieles a Vilma, Raúl, Fidel y al Socialismo.
¡FELICIDADES, COMPAÑERAS!
¡FELICIDADES, COMPAÑERAS!