Una ofrenda floral en nombre del pueblo de Santiago de Cuba, fue depositada en la tumba que guarda sus restos en el cementerio Santa Ifigenia, desde el 24 de abril de 1923, luego de ser trasladados de Kingston, Jamaica, lugar del fallecimiento de la anciana.
También el Museo Casa Natal Antonio Maceo se sumó al tributo a la corajuda madre y patriota, con una jornada que incluyó charlas y conferencias en escuelas, círculos de abuelos y otros colectivos del Consejo Popular Los Maceo, donde está enclavada la institución cultural en el Centro Histórico.
Antonio Enrique de Nacimiento, especialista del museo, dijo a la AIN que la muestra del mes comprendió dos fotografías originales pertenecientes al archivo, que recogen momentos del último adiós del pueblo en el ayuntamiento de su tierra natal, en 1923.
El Centro de Estudios Antonio Maceo, con sede en esta ciudad, igualmente realizó numerosas actividades en recordación a la madre de Los Maceo, procedente de una familia mulata libre.
Muchas anécdotas hablan del amor a la Patria y el valor de esa mujer, que supo crecerse ante la muerte de su esposo Marcos Maceo y algunos de sus hijos en combate.
En una ocasión, cuando fue llevado Antonio con severas heridas y ante el llanto de las mujeres a su alrededor, expresó: "¡Fuera, fuera faldas de aquí, no aguanto lágrimas!".
Varios bustos y monumentos perpetúan su memoria, como el enclavado en el Paseo de Martí y la calle Santo Tomás, obra de la escultora Teresa Sagaró, el del hospital materno que lleva su nombre y en el antiguo ayuntamiento, donde se velaron sus restos traídos del vecino país caribeño.