Waldo Barrera Martínez (wbarreram@uci.cu) - Cubainformación.- Revisando las noticias publicadas hoy en los medios digitales, encuentro las últimas declaraciones de la muy difundida –en los círculos contrarrevolucionarios y de los más acérrimos enemigos de Cuba y su revolución, los constructores de su imagen a fuerza de muchos, muchos USD–, Yoani Sánchez, publicadas por El Nuevo Herald y replicadas después en varios medios.
Resulta que la tal Yoani fue recibida hoy en el Congreso de la Unión como parte de un periplo por varios países, en su aventura La vuelta al mundo en 80 días, nada más y nada menos que por la flor y nata del lobby anticubano: Ileana Ros-Lehtinen, Mario Díaz-Balart, Bob Menéndez y Marco Rubio. “Dios los cría y el diablo los ajunta”.
Luego de aclarar que no es una “ilusa”, advertía que la democratización de Cuba no llegaría solo con periodistas “independientes” y nuevas tecnologías, sino, y léanlo bien: “cuando los cubanos pierdan el miedo”
Volvía a insistir que no era una “ilusa” pues sabía “que solamente con un teléfono móvil […], una cuenta en Twitter […] y un blog no se puede democratizar un país.”
“Lo que más hace falta es que los cubanos pierdan el miedo. No funciona si somos un pequeño grupo criticando, si somos un pequeño grupo intentando cambiar las cosas.”
“Mientras el oportunismo, las máscaras y los silencios sean la actitud que asume la gran mayoría de los compatriotas ante la realidad cubana, mientras esto siga así, nada va a cambiar.”
Resulta que para este personaje, una perfecta desconocida en Cuba y el mundo, muy a pesar de quienes la sostienen ocultamente con el dinero del contribuyente norteamericano y de la mafia anticubana, los residentes en esta tierra somos todos unos miedosos. Tal ofensa no podía quedar sin respuesta.
¡Caramba…! ¿Es que Yoani no dio lecciones de Historia de Cuba en la escuela? Si hubiera sido así no habría podido obviar tantas páginas gloriosas a lo largo de varios siglos, desde las propias rebeliones de esclavos y las guerras de independencia contra el yugo colonial español hasta los muchísimos hechos ocurridos en la llamada república a medias –a medias por la preponderancia norteamericana en todos nuestros asuntos durante más de 50 años, por los mismos que hoy la aúpan–, el alzamiento de los Independientes de Color, las agudas luchas estudiantiles, el enfrentamiento a la dictadura de Machado con la Revolución de los años 30, el asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, el Granma, la lucha en la Sierra protagonizada por un verdadero ejército de pueblo… Obviamente el pago le nubló la vista, y el cerebro...
¿Cree la flamante agente que un pueblo como este, con una tradición de lucha centenaria y más de 11 millones de habitantes, puede someterse con el miedo? Solo mentes “ilusas” como la suya pueden creerlo.
Luego, no les quedará más remedio que continuar siendo un pequeño grupo de mercenarios pagados con teléfonos móviles, cuentas en Twitter y blogs en internet, repudiados por la inmensa y aplastante mayoría de sus conciudadanos en todos los espacios y frentes.
No le quepa dudas, el día que los cubanos de acá dejemos de respaldar hasta las últimas consecuencias, con uñas y dientes, este proceso genuinamente popular, con grandes aciertos y errores, imperfecto como toda obra humana, no hará falta la intervención de sus mentores ¿Vale?
