Por Arthur González/El Heraldo Cubanos -Martianos-Hermes-Cubainformación.- A pesar de que el presidente Barack Obama afirmó públicamente que Estados Unidos tenían que cambiar de táctica para derrocar el socialismo en Cuba, debido a que la desarrollada durante más de medio siglo no alcanzó los resultados propuestos, los integrantes de la mafia terrorista anticubana de Miami ven peligrar la posición alcanzada en 56 años.
Una de ellas, y posiblemente la más afectada, es la representante por la Florida, Ileana Ros-Lehtinen, quien logró ascender a puestos claves en el Congreso principalmente por difamar a Cuba y sus campañas para satanizar a Fidel Castro, siguiendo los planes diseñados por la CIA, y no precisamente por defender a los votantes estadounidenses.
Después que los miembros principales que integran en Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, tomaron en diciembre del 2014 la decisión de cambiar la política hacia Cuba, tratando de corroerla desde adentro, la representante Ros-Lehtinen no ha hecho más que acusar a Obama de traicionar a los “exiliados cubanos”, quienes viven de ese cuento y de los presupuestos millonarios que asigna anualmente la Casa Blanca para planes y programas que no han podido vencer a Castro.
Ahora al ver en la TV al presidente Raúl Castro junto con Obama, reunidos para tratar por la vía pacífica lograr un entendimiento razonable y adecuado, la Ros-Lehtinen grita histéricamente que “ninguna cantidad de reuniones cambia la realidad de la isla y que, por el contrario, legitiman la posición del régimen castrista”.
Eso es precisamente lo que la mafia anticubana ha impedido durante medio siglo, que Estados Unidos reconozca que en Cuba hay un gobierno apoyado mayoritariamente por su pueblo y encabezado por los líderes históricos que ganaron la guerra contra el dictador Fulgencio Batista, asesino al que apoyaron ellos hasta su huida de la Isla en la madrugada del 1º de enero de 1959.
Los mafiosos anticubanos se sienten con el agua al cuello, al constatar que ya no son consultados por la Casa Blanca para establecer las políticas hacia Cuba y su época de esplendor se desvanece rápidamente, pues se vuelven en barreras al cambio para la introducción de nuevas tácticas a emplear, con el sueño de derrumbar el socialismo caribeño como hicieron con éxito contra la URSS.
Al no tener argumentos, la vetusta congresista ha tenido que echarle mano a la detención de Danilo Maldonado, cubano que se auto denomina “El Sexto”, personaje que no tiene ni historia ni gloria y fue expulsado del curso que inventó la Fundación Nacional Cubano Americana en el Miami Dade College, para 17 jóvenes cubanos, con un presupuesto de cientos de miles de dólares aportados por el Departamento de Estados.
A Maldonado lo han querido beatificar como artista, a pesar de que no puede presentar una sola obra de arte, ya que su único “mérito” es pintar en paredes y fachadas de casas la palabra El Sexto, y actualmente está arrestado por causas no políticas, según declaraciones oficiales.
Triste el caso de Ileana y sus compinches, que después de llegar a lo más alto de la escena política estadounidense, caigan en picada estrepitosa y posiblemente abandonados a su suerte.
Ante lo que parece ser el tétrico futuro de la mafia anticubana, recordamos las palabras de José Martí, cuando señaló:
“…cerca del cadalso no viven bien más que los cuervos”·
