Cubainformación.- El reguetonero cubano Yulien Oviedo había sido en vetado en Miami, tras haber declarado, en una entrevista, que no pensaba que “Cuba sea una dictadura”. El programa del presentador Alex Otaola y diversos medios digitales subvencionados por el gobierno de EEUU llevaban semanas pidiendo acciones contra el artista. Hasta que, finalmente, un local privado que había contratado uno de sus conciertos, decidió cancelarlo ante las presiones del “anticastrismo”.

Otaola, exultante, anunciaba en su programa: “Cancelan concierto de Yulien Oviedo en Miami hasta que sepa qué es una dictadura”.

El cantante, al parecer, ya sabe “qué es una dictadura”. Leemos que “Yulien Oviedo se retracta”. Pidió disculpas y declaró al canal Telemundo 51 que dio “la respuesta equivocada”, lo que “me tiene a mí, a mi familia y a mi equipo de trabajo desconcertados”, porque realmente "en mi país sí existe una dictadura", debido a “la represión con las personas, los policías dándoles golpes a las mujeres”.

Es un caso de más de expurgación política con fines comerciales como, anteriormente, el de Gente de Zona y Descemer Bueno. Tal como explicamos en nuestro trabajo Patria y Vida: la libertad de la pistola en la sien, ambos, para conseguir el perdón de la mafia fascista de Miami, comenzaron a declarar contra la Revolución cubana y participaron en el panfleto musical “Patria y Vida”. Y fueron recibidos, hace días, por el alcalde de Miami, que levantó, de esta manera, el veto impuesto a los artistas, dependientes del mercado latino, cuya puerta está en dicha ciudad de EEUU.

Un episodio más de la serie “Vergüenza contra dinero”, parafraseando a Eduardo Chibás. Y una muestra del clima de terror cultural en el sur de la Florida. Artistas de la Isla como Paulito FG y Haila María Mompié ya fueron declaradas personas non grata por la alcaldía de Miami y debieron suspender sus conciertos. Pero en ambos casos se impuso la dignidad y la vergüenza frente al dinero.