Por: Osmany Sánchez (jimmy@umcc.cu / @JimmydeCuba).- He tratado de no hacerme muchas ilusiones con eso de que al bloqueo le queda poco, sé que el beneficio para la economía cubana será enorme pero es mejor esperar que las cosas se hagan realidad. Apoyo la idea de la sustitución de importaciones, de producir las cosas en Cuba, de explotar las potencialidades del país pero eso tiene que pasar del discurso a la realidad.
Ayer pasaron por mi cuadra vendiendo la cabeza de ajo a seis pesos y advirtiendo que aprovecharan porque los demás lo tenían a siete. ¿Siete pesos una cabeza de ajo? Cuando escucho eso, recuerdo los camiones cargados de ajo, parados en un parqueo por trabas burocráticas y no sé si todavía no se ha resuelto ese problema, si hubo problemas con el “paquete tecnológico”, con la sequía o si la culpa es del cambio climático pero de lo que estoy seguro es de que no puedo dar seis o siete pesos por una cabeza de ajo.
Dicen que los bajos precios del petróleo se deben a factores geopolíticos y al surgimiento de nuevas tecnologías para la extracción del oro negro. Ojalá alguien invente alguna variante del “fracking” para producir ajo.
He estado haciendo una investigación porque si seguimos por este camino, me saldrá más barato comprar el ajo en California y decirle a alguien que me lo mande por correo….hmmm, eso de mandarlo por correo puede ser otro problema, porque si el paquete que recibes pesa menos de 1,5 kg lo cobran en CUP pero si se pasa de eso lo cobran a veinte CUC!!!
¿Alguien sabe cuántas cabezas de ajo puedo comprar en los Estados Unidos y que el paquete pese menos de 1,5 kg?