Ilsa Rodriguez - PL.- Cuba reiteró hoy sus denuncias ante las Naciones Unidas por las transmisiones ilegales de radio y televisión de Estados Unidos contra ese país, "una agresión radio electrónica que infringe abiertamente las normas del Derecho Internacional".  El embajador cubano, Abelardo Moreno, dijo en el debate general del Comité de Información de la ONU que las transmisiones ilegales de radio y televisión contra Cuba no emiten información, sino que, por el contrario, la falsifican y tergiversan.

Explicó que el objetivo es tratar de promover el desencanto y el cuestionamiento del pueblo cubano a su Revolución y no respetan valores como la objetividad y el apego a la verdad.

El representante permanente de Cuba ante las Naciones Unidas expresó que esas transmisiones fabrican con premeditación la mentira e incitan al odio destructivo.

Recordó que desde el inicio de esta agresión hace casi 25 años, el gobierno cubano ha denunciado su ilegalidad en diferentes foros, en particular en la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT).

Al respecto puntualizó que esta guerra radio-electrónica transgrede la Constitución, el Convenio y el Reglamento de Radiocomunicaciones de esa organización.

El experimentado diplomático cubano comentó que cada semana emisoras radicadas en territorio estadounidense transmiten hacia Cuba más de mil 955 horas de radio y televisión por 31 diferentes frecuencias de onda media, corta, FM y TV.

"Se generan desde ellas de 231 a 258 horas diarias de una programación que nada tiene que ver con información equilibrada y objetiva", subrayó.

Apuntó que el Congreso de Estados Unidos aprueba cada año un presupuesto de más de 30 millones de dólares de fondos federales para ese fin, por lo que en menos de dos décadas ese Gobierno ha gastado unos 500 millones de dólares con este propósito.

Señaló que los nuevos métodos para esas agresiones, como el uso de aviones militares, evidencian un total desprecio por las normas que rigen las relaciones internacionales y la violación de los acuerdos de la UIT, de los que Estados Unidos es signatario.

Precisó que de las 25 emisoras que transmiten programaciones subversivas contra Cuba, 20 dirigen sus señales directamente contra esa nación, entre ellas la Voz de las Américas y las mal llamadas Radio y TV Martí, propiedades del gobierno estadounidense.

Expresó que varias de estas emisoras pertenecen o prestan sus servicios a organizaciones vinculadas con conocidos elementos terroristas que residen y actúan contra Cuba en territorio norteamericano.

El diplomático reiteró la condena de Cuba a esta agresión y su rechazo a la pretensión del gobierno estadounidense de mantener esas trasmisiones, en franca violación de las normas vigentes en el mundo materia de regulación del espectro radio electrónico.

"Cuba no ha pedido éstas transmisiones y no las necesita. Nuestro país tiene el derecho de decidir de manera soberana el tipo de información que desea recibir", dijo Moreno.

Agregó que "no le corresponde este papel a los que desde la administración gubernamental de los Estados Unidos, malgastando los aportes de los contribuyentes, y en contubernio con elementos terroristas, fraguan sus planes contra la Revolución Cubana".

En su discurso, el Embajador expresó que la contradicción más evidente en el mundo es la existencia de un acelerado desarrollo tecnológico en las comunicaciones y la incapacidad de que tal avance se traduzca en beneficios para todos.

Al respecto alertó que los modelos que sustentan el uso de los avances tecnológicos continúan siendo los consumistas que provienen de los centros generadores de las tecnologías.

El mundo en desarrollo no puede acceder a tales tecnologías con la velocidad ni eficiencia que lo hace el mundo desarrollado. La brecha tecnológica entre el Norte y el Sur no disminuye, sino que crece cada vez más, agregó.