Juventud Rebelde.- Organizado por la UJC y los Joven Club de Computación con un festival recreativo y deportivo, concursos y 80 máquinas en el exterior del recinto del Palacio Central de Computación y por toda la nación, este domingo celebraron una gran fiesta por el cierre del verano, dedicado fundamentalmente a niños y jóvenes en saludo a los aniversarios 45 de la organización pioneril y los 20 años de este programa de la Revolución.
Los Joven Club de Computación y Electrónica salieron la mañana dominical a las calles de toda Cuba para celebrar junto al pueblo su cumpleaños 20 y el feliz final del verano con una fiesta gigante, especialmente dedicada a niños y niñas.
Plaza mayor de la alegría fue el Palacio Central de Computación, que en los parques de la Fraternidad y El Curita instaló 80 ordenadores, con libre acceso para que niños y adolescentes puedan jugar, competir y, también, aprender.
La oferta incluyó festivales deportivos y recreativos, espectáculos artísticos para grandes y chicos, minicarnavales, ferias gastronómicas, pantallas gigantes para la exhibición de videoclips con buena música cubana.
Fue una buena experiencia, por vez primera los Joven Club idean y organizan algo de tanta dimensión, aseguró a la AIN Raúl Van Troi Navarro Martínez, director de ese programa de la Revolución.
El desarrollo de este revolucionario programa, concebido por el Comandante en Jefe Fidel Castro y puesto desde el primer día en manos de la UJC, permite hablar hoy de 602 instalaciones en la nación, cifra que incluye cuatro palacios y cinco laboratorios móviles para llevar esta ciencia a los más intrincados parajes.
En total, los Joven Club disponen de más de 6 000 ordenadores, así como también de medios de impresión, digitalización de imágenes, almacenamiento y reproducción de información, al servicio de todo el mundo, más ahora que en muchos casos las puertas permanecen abiertas día tras día, las 24 horas.
Solo de los cursos regulares impartidos semestralmente han egresado en estos 20 años 1.190.788 personas de todas las edades, pero una cantidad similar es atendida cada mes en esas instalaciones, consagradas a la misión social de proporcionar una cultura informática a la comunidad y, en especial, a la infancia y la juventud.
