ACN / Cubadebate.- La severidad de la sequía en Cuba y las lluvias a destiempo impactaron en forma negativa en los resultados de la zafra que concluyó hace poco en el país, razón por la cual los azucareros solo alcanzaron el 80 por ciento de su plan.
El hecho de padecer la falta de precipitaciones en la primavera y el verano, así como su exceso posterior, influyó en la calidad de la materia prima, se informó hoy en un encuentro sobre el desenlace de la campaña 2015-2016, en el Centro Nacional de Capacitación Azucarera.
Los 50 centrales que abrieron sus capacidades desde noviembre pasado molieron el 95 por ciento de la caña prevista, muy por debajo en comparación con la anterior, aunque se mantuvo el crecimiento en el quinquenio a un ritmo del cinco por ciento anual, explicó Noel Casañas Lugo, vicepresidente del Grupo Empresarial AZCUBA.
Sin embargo, añadió que en el incumplimiento repercutieron también, entre otras causas, el mal desempeño por alto tiempo perdido en 12 industrias, deficiencias en el estimado de la cosecha en las unidades empresariales de base y la arrancada tardía de 13 fábricas.
En consecuencia, tampoco lograron sus propósitos la producción de derivados: alcohol, alimento animal para el ganado vacuno y porcino, levadura Sacharomyces, a partir de fermentaciones de los mostos, sorbitol y el madurador FITOMAS-M para el aumento del contenido de sacarosa en el periodo de inmadurez de la caña.
Sobre el particular, Orlando García Ramírez, presidente de AZCUBA, llamó la atención acerca de la necesidad de fortalecer la exigencia, el control, la disciplina tecnológica del sistema en su conjunto, con una adecuada preparación en el momento preciso en cada etapa del proceso agro-industrial.
Añadió que solo así podrá impregnarse cultura y ordenamiento productivo, capacitación del personal y creación de eficientes sistemas de trabajo.
Santiago Pérez Castellanos, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y jefe de su Departamento Agroalimentario, coincidió con García Ramírez en que la reunión se caracterizó por ser crítica y analítica sobre las deficiencias para impedir su repetición.
Con múltiples intervenciones de empresarios, técnicos y especialistas, el debate incluyó lo que debe hacerse en la zafra 2016-2017, cuando se prevé un 15 por ciento de crecimiento productivo en relación con el plan de la campaña que terminó recientemente.
