Por Lázaro Fariñas*/Foto Virgilio Ponce- Martianos-Hermes-Cubainformación.- La ex agente de la CIA, Valerie Plame, no cree que Edward Snowden, el hombre que ha metido en un escándalo internacional al gobierno de los Estados Unidos, sea un traidor a su país tal y como lo acaba de afirmar el ex vice presidente del gobierno de George W Bush, el insoportable, pedante y reaccionario Dick Cheney. La Sra. Plame ve muy irónico el hecho de que el flamante ex vice presidente se refiera a Snowden como un traidor por haber sacado a la luz pública el hecho de que el gobierno norteamericano esté vigilando, leyendo y escuchando, no solo a los ciudadanos de este país, sino a todos los ciudadanos del mundo por medio de la internet, las redes sociales y las llamadas telefónicas nacionales e internacionales. Valerie Plame también ve muy irónicas las acusaciones de Cheney en contra de Snowden, ya que fue precisamente este y su grupo de allegados los que, traicionándola a ella y a las agencias de inteligencia estadounidenses, filtraron a la prensa su verdadera identidad, solamente para tratar de desprestigiar al esposo de esta por su informe en que desmentía las compras en África de uranio enriquecido por parte del gobierno de Saddam Hussein, tal y como lo estaba anunciando la administración del ex presidente George W. Bush, como parte de la campaña de miedos y de mentiras llevada a cabo para justificar la invasión de Iraq.
Por Lázaro Fariñas*/Foto Virgilio Ponce -Martianos-Hermes-Cubainformación.- Hace más de cincuenta años que vivo fuera de Cuba y aunque desde los últimos 20 he estado yendo allá con cierta frecuencia, nunca me he pasado más de diez seguidos. Nunca he pensado seriamente en volver en forma definitiva y no lo he hecho por la sencilla razón de que aquí viven mis hijas y mis nietos, y si una vez, por cosas de la vida, puse un mar entre mis padres y yo, no estaría dispuesto a hacer lo mismos con mis hijas, con las cuales tengo una relación mucho más apegada a la que con mis padres tuve. De todas formas, el hecho de que un día salí de Cuba, nunca Cuba salió de mí. Siempre he llevado el amor a aquella tierra muy adentro, no importando, en lo más mínimo, los lugares donde he residido. Por mucho que pueda querer a los Estados Unidos, nunca le llegaré a querer como he querido, quiero y querré al país donde nací. Este es el lugar donde he residido toda mi vida adulta, pero Cuba es mi patria, donde nací y me crié y donde nacieron, se criaron, y vivieron todas sus vidas mis padres, mis hermanos y mis abuelos.
Por Lázaro Fariñas*/Foto Virgilio Ponce -Martianos-Hermes-Cubainformación.- Hace muchos años, allá por los sesentas, cada vez que se comentaba sobre la política exterior de los diferentes gobiernos norteamericanos, se decía que esta estaba principalmente dividida entre dos facciones diametralmente diferentes, aquella que apoyaba la guerra y la violencia para enfrentarse a los conflictos mundiales y aquella otra, que decía que lo mejor era utilizar la diplomacia y el diálogo amigo para resolver los diferendos entre naciones. Eran los tiempos en que se decía que por los cielos de Washington volaban en armonía las palomas y los halcones, cada uno haciendo sus nidos en el Capitolio, el Departamento de Estado, el de Defensa o en la mismísima Casa Blanca. A pesar que la cadena de guerras contiguas nunca se ha detenido en su crecimiento, ambas facciones lograban, en aquella época, que se estableciera un debate civilizado sobre los temas antes de volver a agregar un nuevo eslabón a la misma.
Por Lázaro Fariñas*/Foto Virgilio Ponce -Martianos-Hermes-Cubainformación.- Los Estados Unidos han vendido al mundo que ellos son los campeones de los campeones de las libertades civiles de sus ciudadanos. Según los voceros del gobierno de este país, ellos les pueden dar lecciones de cómo se deben de respetar los derechos humanos a todas y cada una de las naciones que se reparten el planeta Tierra. Aquí sí que hay democracia de la buena. Todo esto fuera magnífico si esas afirmaciones no estuvieran viciadas. Es verdad que en este país hay tres poderes que son los que representan al Estado y es verdad que en papel son independientes el uno del otro. El presidente no llama a un juez para decirle la condena que debe aplicar en un caso determinado, ni a un legislador para que apruebe tal o mas cual ley. Por supuesto, mientras que todo sea dentro del sistema existente, lo que en inglés le dicen el establishment, ninguno de los miembros de los tres poderes interfiere visiblemente con el otro. Aquí todo el mundo sabe jugar con la cadena, pero a nadie se le ocurre tocar al mono.
Por Lázaro Fariñas*/Foto Virgilio Ponce -Martianos-Hermes-Cubainformación.- "Julio Robaina es el protagonista del último de los escándalo de estos personajes de la fauna anticubana de Miami, bueno, el último por ahora". Así fue como terminé el comentario que envié a Juventud Rebelde a finales de la semana pasada, en el que comentaba el escándalo en el que el ex alcalde de la ciudad de Hialeah era su protagonista. Pues bien, no había pasado media hora del envío del mismo, cuando saltó la noticia de que el jefe de despacho del nuevo congresista federal por el distrito 26 de la Florida, Joe García, había renunciado al destaparse un escándalo de marca mayor relacionado con la solicitud de boletas ausentes para las elecciones primarias del partido Demócrata, en las que el congresista salió vencedor. Por supuesto que el "por ahora" de mi comentario no era una mera suposición mía, sino que estaba basado en la triste realidad que estos personajes de la fauna anticubana de Miami han implantado en este país. Historias de escándalos y corrupciones que, como las aguas de un río, no paran de correr. Son los mismos escándalos que se repiten una y otra vez y en los que solo cambian los nombres de los personajes.
Por Lázaro Fariñas*/Foto Virgilio Ponce -Martianos-Hermes-Cubaiformación.- El relajo formado por los anti cubano-americanos en los Estados Unidos no tiene fin. Los criollitos no salen de un escándalo para entrar en otro. Cuando no son investigados por tráfico de influencia y prostitución infantil, son acusados de fraude al servicio de salud o de conspiración para cometer delitos financieros, estafas o falsificación de documentos. Es un verdadero carnaval de delitos que se entretejen los unos con los otros. El gobierno cubano ha bautizado a estos elementos ultraderechistas de Miami como mafiosos y no es para menos, ya que lo que estos han formado en este país es una verdadera mafia organizada, con todo lo que de ella se deriva. Actúan en manadas como los lobos, se reparten botines y hasta llegan a bautizar calles con sus nombres. Incluso, se hacen homenajes entre ellos mismos y hasta se entregan las llaves de las ciudades como reconocimientos de sus méritos. Claro que en algunas ocasiones sus escándalos son tan grandes que se ven obligados a rebautizar las calles y recoger una que otra llave otorgada.
Por Lázaro Fariñas*/Foto Virgilio Ponce -Martianos-Hermes-Cubainformación.- El asesinato en plena calle de Londres del soldado británico Lee Rigby me ha traído a la memoria aquel verso del poeta español Ramón de Campoamor que dice: «En este mundo traidor / nada es verdad ni mentira / todo es según el color / del cristal con que se mira». Y me trajo a la mente este verso el ver la reacción tan profunda de dolor que ha traído a la opinión pública, tanto de Europa como de Estados Unidos, este hecho grotesco ocurrido en plena calle londinense.