Alberto Buitre - Oficio Rojo - Borges consideraba que los gobiernos eran un mal necesario, en tanto los seres humanos no somos –o mientras no seamos–, capaces de actuar éticamente. Se consideraba a sí mismo un anarquista conservador, por lo que sin ambages decía no creer en la política; creía, más bien, en la ética. Siguiendo este sencillo consejo ¿es posible que la utopía de una sociedad justa, pacífica y feliz puede alcanzarse no por vía de la lucha de clases, sino mediante la simple implementación de una conducta ética en casa cosa que realicemos?