Foto: Cubadebate.
Ofrendas de Raúl y Díaz-Canel en homenaje a Eduardo Sosa (+Fotos)
Santiago de Cuba, 12 feb (Prensa Latina) Ofrendas florales del general de ejército Raúl Castro y del presidente Miguel Díaz-Canel acompañaron hoy las cenizas del trovador santiaguero Eduardo Sosa, en su último adiós.
Fotos: Yugdanis Vicet Gómez (FotosPL)
En el escenario de la Casa de la Trova, de Santiago de Cuba, el pueblo de la Ciudad Creativa en la Música, en representación de los cubanos, rindió el último adiós al bardo, oriundo del histórico municipio de Segundo Frente.
Un espacio inmenso para la cultura cubana resultó pequeño está vez, para las ofrendas de personas e instituciones que se sumaron al tributo al cantautor, quien dejó una huella entre los cultores del género trovadoresco en Cuba.
También enviaron arreglos florales el presidente del Parlamento Esteban Lazo, e instituciones como el Comité Central del Partido, la Asamblea Nacional del Poder Popular, el Ministerio de Cultura y una en nombre del Pueblo de Cuba.
Artistas y agrupaciones musicales locales, estudiantes, pioneros, sus hermanos masones y el pueblo en general, reverencian al trovador cuyas cenizas reposan en el escenario de la Casa de la Trova junto a su guitarra, simbolizando la última presentación de Eduardo Sosa, antes de su sepelio en el cenizario provincial.
Carta abierta a Eduardo Sosa
Guille Vilar
Cubadebate
Sosa, Hermano querido:
Siempre el momento de la partida es doloroso, ya sea porque nos vamos sin avisar o porque nos mantenemos en una angustiosa pausa de espera antes de iniciar el viaje, pero todos sabemos cuál será el desenlace final. Y realmente, duele mucho porque no te tocaba todavía. Eras muy joven. Te quedaban muchas canciones por componer, muchas versiones qué hacer y muchas actividades por realizar.
Es cierto que me llamaste la atención con el Dúo Postrova, pero de verdad-verdad, cuando naciste para quedarte en el seno de tu pueblo, fue con la canción “A mí me gusta, compay”. Y aunque se dice muy fácil, todos sabemos que lograr semejante aceptación es toda una hazaña como compositor, porque el pueblo no se equivoca. Nada mas que de citar el nombre de ese cubanísimo tema, ya todo el mundo sabe que tú eres su creador. Pero al conocerte personalmente, pude comprobar que eras justamente lo que decías en la canción: un cubano franco, abierto y sencillo, sin mayores pretensiones, pero que no intentaran alejarte de los tuyos porque era como quitarte el oxígeno que todos respiramos a tu lado en esta querida Isla del Caribe.
Además, siempre estabas en algo que tuviera que ver con la trova, ya fuera en la organización y dirección del Festival de la Trova “Pepe Sánchez” en Santiago de Cuba; en la conducción junto a Marta Campos del programa televisivo Entre Manos o poniendo tu voz en canciones emblemáticas para la nación cubana como “Cabalgando con Fidel” al lado de las voces de Raúl Torres, Luna Manzanares y Annie Garcés.
Precisamente por la intensidad vital de tu emotivo canto, no pocos fueron los reclamos que recibiste para realizar vibrantes y hermosas versiones como “Magdalena” con los versos del Apóstol para el disco de otro hermano nuestro, Martí en Amaury, o en tu versión de “La bayamesa”, ese otro himno patrio que tenemos de Céspedes, Fornaris y Castillo, canción que te ha inmortalizado con un sublime video clip.
Hermano, si te he hablado un poco acerca de tu huella, es para que sepas que siempre estarás entre nosotros porque honramos tu memoria con este pensamiento del Apóstol: “Yo no conozco mas muerte que una, y es la de perder la fe en mis compatriotas, y de eso, sé que no he de morir”.
Te queremos un mundo.
A Eduardo Sosa
Nancy Morejón
La Jiribilla
La sangre seca de tus venas,
a pesar de tu fuerza,
cruza las aguas de un arroyuelo,
bajo los claros cielos de la Sierra.
Trovador de las lunas,
mecido por el azul de las montañas,
nunca serás un desaparecido,
nunca volverás a emprender
el camino más nómada
con rumbo a todas las bahías.
Busco una manta para tu fiebre
y la Isla arrulla su mejor canción.
Yo te arroparé siempre para escuchar tu voz indescriptible,
con ese canto único atravesando la manigua
y el bosque de las flores, niño mío, siempre a tus pies.
El Cerro, 8 de febrero 2025
El último adiós a Sosa: Pueblo de Santiago de Cuba despide al trovador cubano
Su hermano Cándido Sosa junto a familiares allegados portaron las cenizas del que por estos días estuvo en vigilia de todo el pueblo del país caribeño. Foto: teleSUR
teleSUR
Las honras fúnebres se realizaron inicialmente en Mayarí Arriba, pueblo natal del artista, al oriente de la Isla, y luego se le rindió homenaje en la Casa de la Trova.
Tras la muerte en la madrugada de este miércoles del trovador y cantautor cubano, Eduardo Sosa, el pueblo de Santiago de Cuba dio el último adiós al artista, en honor a su legado. Al homenaje acudieron cientos de personas de la oriental provincia.
Inicialmente, las honras fúnebres se realizaron en el poblado de Mayarí Arriba, donde nació el cantante. Posteriormente, sus cenizas fueron trasladadas a la Casa de la Trova Pepe Sánchez, en la provincia de Santiago de Cuba, donde artistas, autoridades y pueblo santiaguero continuaron rindiendo homenaje.
Su hermano Cándido Sosa, junto a familiares allegados, portaron las cenizas del que por estos días mantuvo en vigilia a todo el pueblo del país caribeño, pues desde el pasado 3 de febrero sufrió un accidente cerebro vascular, por lo que estuvo varios días reportado en estado crítico y luego en estado desfavorable.
Los restos de Sosa fueron depositados en el Cementerio Santa Ifigenia de la ciudad de Santiago de Cuba, donde se encuentran otras célebres e importantes figuras de la historia, el arte y la cultura cubanas. Foto: Cubadebate / Cándido Sosa Facebook.
Honrar a un Compay
Sosa fue conocido por su capacidad para fusionar la tradición de la trova con elementos contemporáneos, dedicando su carrera artística a a la promoción de la música cubana y a la defensa de su legado.
En 1997, formó el dúo Postrova junto a Ernesto Rodríguez. Estuvieron activos durante cinco años y lograron varios hitos musicales, como su inclusión en el diccionario enciclopédico de la música cubana. Participaron en la película «Las profecías de Amanda» y ganaron el Premio Abril en 1998.
El dúo grabó dos discos: «Postrova,» bajo el sello Caribe Productions y EMI-Odeón España, y un segundo álbum inédito que contaría con colaboraciones como las de Ana Belén.
Sosa también dirigía el Festival Internacional de la Trova Pepe Sánchez, lo que evidenciaba su compromiso con la canción y su deseo de renovarla, respetando siempre su herencia.
Adicionalmente, condujo el programa televisivo «Entre manos» junto a la musicóloga cubana Marta Campos, enfocado en la promoción de la canción trovadoresca.
A partir de este momento, Sosa descansará en el Sendero de los Trovadores del Cementerio Santa Ifigenia, donde reposan los restos de grandes figuras como Pepe Sánchez y Compay Segundo.
Escritores y artistas de Cuba unidos para un canto a Eduardo Sosa
La Habana, 12 feb (Prensa Latina) La Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) alzó su voz y un canto de amor para recordar al trovador Eduardo Sosa, fallecido hoy en la oriental provincia de Guantánamo.
El mensaje de la Uneac, organización la cual representaba como su vicepresidente, expresa en la red social X el sentir por la pérdida del músico, muy estimado por los cubanos.
La trova cubana ha perdido a uno de sus más comprometidos defensores con el fallecimiento este 12 de febrero del cantautor Eduardo Sosa Laurencio, a los 52 años, a consecuencia de un accidente cerebrovascular. Sosa fue una de las voces más queridas de su generación.
Otra de las prestigiosas instituciones cubanas, la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (Egrem), publicó también el sentir de los colegas y entidades precedentes.
Amanecemos hoy con la triste noticia del fallecimiento del trovador Eduardo Sosa. Desde nuestra empresa enviamos las más sinceras condolencias a familiares y amigos de Sosa, sostuvo.
Vuela alto amigo, concluyó la Egrem su mensaje.
Ministro de Cultura y dirigentes cubanos alzan voz por Eduardo Sosa
La Habana, 12 feb (Prensa Latina) El ministro de Cultura de Cuba, Alpidio Alonso, compartió en su red social X la noticia del fallecimiento del trovador cubano Eduardo Sosa, ocurrido hoy en horas de la madrugada.
Hasta siempre, querido hermano. Descansa en paz, así expresó Alonso su pesar, tras hacerse público el informe del Instituto Cubano de la Música.
Los sentimientos de tristeza y dolor en las redes sociales circulan, y el miembro del Buró Político del Partido Comunista de Cuba Roberto Morales también escribió: «todos admiraremos siempre la excepcional voz de Eduardo Sosa y su firme compromiso con Cuba y su Revolución».
Así lo recordaremos. Condolencias a su familia, amigos y a todo el pueblo que hoy lo llora, concluyó.
La vice primera ministra de la República de Cuba, Inés María Chapman, se sumó al sentir de los cubanos que querían a Sosa y seguían su música.
Con profunda tristeza hemos conocido esta madrugada sobre el fallecimiento del destacado compositor, trovador, revolucionario, compañero Eduardo Sosa. Lleguen nuestras condolencias a familiares y amigos, declaró la alta funcionaria cubana.
Adiós a un hermano entrañable, expresa en Cuba Abel Prieto
La Habana, 12 feb (Prensa Latina) El presidente de Casa de Las Américas, Abel Prieto, reflejó en su cuenta oficial de la red social X el dolor por el deceso en la madrugada de hoy del músico cubano Eduardo Sosa a la edad de 52 años.
Sosa sufrió un accidente cerebrovascular hemorrágico el pasado 4 de febrero y desde entonces permaneció ingresado en el Hospital General Docente Dr. Agostinho Neto, de Guantánamo.
Hasta altas horas de la noche del martes, y varias veces al día, se difundieron informes sobre su salud, mientras las palabras que se repetían eran: “pronóstico reservado”.
Después de poco más de una semana luchando junto a un equipo de buenos médicos el músico perdió la batalla y falleció.
Por decisión familiar su cadáver será cremado y se le rendirá homenaje póstumo en el cine de su natal Mayarí, y, posteriormente, en la Casa de la Trova de Santiago de Cuba. Sus cenizas serán depositadas en el cementerio de Santa Ifigenia.
Hasta siempre hermano Eduardo Sosa, publicó José María Vitier, quien agregó que el músico fue un gran artista y amigo.
Clarín de todas las trovas. Tu voz estremecida y necesaria será inolvidable. Ese aroma inconfundible de patria y cubanía se nos queda vibrando en el pecho. Más ahora que su recuerdo tiene la Vida por delante, declaró Vitier.
De igual forma, el dúo Buena Fe lamentó el fallecimiento de Sosa y con palabras emotivas publicó en redes sociales su sentir.
Ahora ¿quién va a ser esa alegría total que eras? ¿El antídoto contra el bulling, la broma siempre oportuna, esa canción precisa y la ratificación de por qué nos dedicamos a esto?
Vas en nosotros. Hasta el último día irás con nosotros, fueron las palabras de Buena Fe.
Desde el Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas, su primera secretaria Meyvis Estévez, manifestó sus condolencias.
Duele la partida física de un trovador inmenso y cubanísimo, de nuestro querido Eduardo Sosa, cuya música y poesía tocaron el corazón de tantos, escribió.
Estévez agregó que sus melodías seguirán resonando, así como su memoria perdurará en cada acorde interpretado.
Compay, tus jóvenes te extrañaremos y mucho, concluyó la funcionaria.
Compay, usted no se va a morir nunca![](https://www.prensa-latina.cu/wp-content/uploads/2025/02/Eduardo-sosa-1.jpg)
La Habana, 12 feb (Prensa Latina) Compay, usted no se va a morir nunca, le dije a Eduardo Sosa la última vez que nos vimos en el aeropuerto José Martí a principios de enero, él otra vez viajaba con su guitarra y su voz a cantarle a Venezuela.
Por: Mario Muñoz Lozano
Ese recuerdo es lo primero que me viene a la mente hoy, cuando me saca de la cama la triste noticia de su muerte, en Guantánamo, después de poco más de una semana luchando junto a un equipo de buenos médicos contra un accidente cerebrovascular hemorrágico que le robó la vida.
En el breve encuentro le conté que estaba al tanto de su participación en el fonograma homenaje al trovador Ángel Quintero, recién terminado por el Estudio Ojalá, un proyecto del cantautor Silvio Rodríguez, con un grupo de prestigiosos músicos cubanos.
Y tenía razón entonces, no se va a morir nunca. Hace unas semanas, la periodista Estrella Díaz, viuda de Angelito, nos reunió en familia para escuchar la grabación del disco de marras, y ahí estaba Sosa, con su timbre inconfundible, con esa fuerza telúrica que le salía de adentro.
Lo escuché cantar en vivo, por última vez, en el encuentro Cantoras «Ella y Yo», en el Centro Cultural Fresa y Chocolate, un día de septiembre del pasado año que gozó en el escenario; se veía a gusto, con el virtuoso Rachid López en la guitarra, encantando a los presentes con un repertorio lleno de amor, trova y boleros.
Algunos recuerdos llegan cual fotogramas: la Plaza de la Revolución Calixto García, abarrotada de público, mientras Sosa guitarrea sus canciones, en la Taberna de Pancho enamorando a la noche, en una de esas tantas Romerías de Mayo, que lo vieron llegar junto a Ernesto Rodríguez, la otra voz de Postrova, hace ya 30 años.
En sus cinco años de vida, el dúo marcó el panorama trovadoresco de finales de los años 90, siendo incluidos en el Diccionario Enciclopédico de la Música Cubana.
Postrova se desintegró a finales del año 2002 y Sosa volvió a su carrera como trovador en solitario, lo que lo llevó con su música y su extraordinaria voz a escenarios de todo el país.
Su repertorio, del cual era autor de muchos temas, incluyó boleros, son tradicional, balada blues; su extraordinario registro vocal le permitió moverse por diferentes géneros musicales.
No hubo eventos musicales en Cuba al que no fuera invitado, su voz se convirtió en sello de la Revolución cubana, con ella y su guitarra acompañó los más importantes eventos en el país, con ella cantó temas emblemáticos del trovador Raúl Torres dedicados a Fidel Castro y Hugo Chávez.
Su canción “A mí me gusta, compay», una de las más solicitadas en cada concierto, es reflejo de su personalidad, apegada a sus raíces de la serranía santiaguera, a lo más autóctono de la música cubana.
Aunque sus últimos años de vida transcurrieron en La Habana, se mantuvo como un gran defensor de los ritmos tradicionales, al punto de ser uno de los principales promotores del Festival de la Trova Pepe Sánchez, de su provincia natal.
La cultura cubana está de luto. Desde el fatídico 3 de febrero, cuando ingresó en el Hospital General Docente Dr. Antonio Agostinho Neto, de Guantánamo, desde todas partes amigos y seguidores estuvieron pendientes de su evolución, y en redes sociales y medios de comunicación cubanos abundaron los comentarios de aliento y solidaridad hacia el querido artista.
“Solo tenía 52 añitos y como quería a Cuba”, me dice esta mañana una vecina tras conocer la noticia; “con lo lindo que hablaba y cantaba”, me afirma otra, y es que Eduardo Sosa, el guajiro, el trovador, no solo encantó a los cubanos con su voz y la canción, también con su alma, sencillez y carisma. Por eso el “compay” no morirá nunca.
De Cuba, su música, de la trova, Eduardo Sosa
La Habana, 12 feb (Prensa Latina) El trovador cubano Eduardo Sosa, fallecido hoy a la edad de 52 años, tenía un talento innato para conversar y ser empático, la ecuanimidad le era inherente y la afabilidad en su voz una valiosa joya:
Por Daimarelys Pérez
Hace casi dos años en entrevista exclusiva con Prensa Latina, Sosa nos expresó que siendo un cubano más, como parte de este pueblo y, con la vida tan convulsa, no se sabe cuándo será el momento exacto para “agarrar” la guitarra.
En el día siempre hay un espacio para ella y alguna descarga, un ensayo, una letra rondando en tu mente siempre, recalcó el trovador a este medio en octubre de 2023.
Tenía una de las voces más potentes y dulces a la vez dentro del repertorio tradicional privilegiada por su tesitura, tono y nivel melódico.
«Todos tienen talento. Lo que es raro es tener el coraje para seguirlo hasta los lugares oscuros adónde conduce», acotó una escritora estadounidense, sin embargo, Sosa tenía el primero y el segundo. El talento para dibujar canciones con su voz. El coraje para esparcirlas y penetrar el alma de la gente.
Gozó, además de la capacidad para que nada opacara esa aptitud de escribir letras de canciones, de cantarlas, tocarlas con su inseparable compañera, la guitarra, y llegar con facilidad a un público inmenso el cual lo quería.
Con su cómplice en cada uno de los conciertos, como una colega más de viaje cotidiano, la dama de las cuerdas, este artista de una sencillez que atrapaba, siempre tuvo un lugar para invitar a las musas a compartir juntos la fiesta de la creatividad.
Alentado quizás por la mismísima Erato, diosa, entre las nueve musas, inspiradora de los poetas y del romanticismo, Sosa cambió el Phormix de esa divinidad (antiguo instrumento de cuerda griego), por la guitarra, y con ella hacía y deshacía notas a su antojo, convertidas luego en hermosas canciones con el complemento de su voz.
Prefiero agarrar la guitarra todos los días, expresó en aquella entrevista con Prensa Latina, y sacarle algo, buscar la manera de sentirme más cómplice con ella; la siento como un instrumento vivo y como tal para mí cultivar esa amistad, ese amor, esa relación es emocionante.
Al referirse a la música, Sosa no pudo menos que enaltecerla, pues, según él, la llevaba desde los primeros segundos de vida. Viaja conmigo desde que nací, declaró con orgullo.
Creo que todo cubano viaja con ella desde que nace, incluso, esas travesías musicales me parecían mejores en otras épocas, hoy la tecnología te permite ser más egoísta.
Recordó cómo pertenecía a una etapa que en su niñez escuchó mucha radio, y ese medio es más social. «Soy de una generación la cual cantaba más colectivamente», puntualizó.
La trova no la pienso como un género, la considero una aptitud, ética y estética, y dentro de ella puedes escuchar son, guaguancó, balada, rock, de todo, por lo tanto, todos esos ritmos confluyen en la trova, compartió con este medio de prensa.
Con toda confianza yo lo que sí me siento es trovador, remarcó Sosa, incluso, defiendo a ultranza esa estética musical y los ritmos de esta isla de manera general, pero canto de todo un poco y, pese a todas esas consideraciones, al final no he estudiado música, soy Licenciado en Pedagogía, destacó.
Con sus composiciones llenas de arraigo tradicional, Sosa se mantuvo en el aprendizaje constante, o por lo menos, «lo intento», según afirmó en aquella tarde de octubre de 2023 en la Casa de Las Américas.
Aprendo de los jóvenes, de los no tan jóvenes, de los clásicos; con respecto a lo que haya podido enseñar, pues debemos preguntarle a ellos, soy de los seguidores de todos, me siento y busco el tiempo para analizar sus obras y comparto con ellos, puntualizó.
Afortunadamente soy de los trovadores que mantiene muy buena relación con todas las generaciones; compartí con Pablo, con Silvio, con Vicente Feliú, con Augusto Blanca, quien sigue siendo uno de mis maestros, y repito, continúo colaborando con cada uno de mis colegas, ya sea de cualquier edad, precisó.
Eso ha hecho que ande por ahí organizando eventos, cuanto encuentro se haga de trova por ahí, ahí estoy yo, todos los días uno debería aprender algo.
Sosa compartió con Prensa Latina la anécdota de una de sus experiencias con Pablo Milanés, cuando fueron juntos de gira y el propio autor de “Yolanda”, por citar solo un tema de tantos, le pidió que cantara una de sus canciones.
Los inicios profesionales de Sosa en 1997 fueron con el dúo Postrova, una etapa importante de cinco años, época de la cual guarda recuerdos, también sueños realizados, transitando por un fecundo camino que lo trajo 28 años después hasta aquí y hasta hoy en su último suspiro.