Andrés Marí - Cubainformación / Fundació Vivint.- Después que el presidente norteamericano Donald Trump declarara hace unos días que EEUU era el país más preparado para vencer la epidemia de coronavirus, el vicepresidente Mike Pence declaró ayer que EEUU no tiene ‘recursos’ para luchar contra el mal. Pero esta declaración -como es usual en los despistes del imperio con la verdad-, ya ha sido escondida por los grandes medios a su servicio.
No obstante podemos seguir leyendo algunas notas que siguen apareciendo sobre los graves problemas que tiene EEUU y ya no solo con el coronavirus, sino con cualquier aspecto de la realidad de ese país si buscamos algo más que los titulares de la prensa.
Yo pensaba que, a raíz del juicio a Julian Assange para ser extraditado a EEUU que se sigue en Londres, el mundo debía descolonizarse de EEUU, pero ahora siento que más que el resto del mundo que en enorme medida EEUU tiene bajo sus órdenes, se trata de las mismísimas personas que forman el pueblo norteamericano quienes habrán de descolonizarse de los valores que EEUU representa para él mismo como país.
Leyendo titulares de la prensa pareciera que muchos norteamericanos y residentes en el gran país de las bibliotecas, museos y otras maravillas culturales, técnicas y científicas del mundo -el gran sentido de lo humano-, no adoran estas humanidades que son la verdadera fiesta de la vida y se decantan por el crecimiento y el comercio armamentístico -el más insignificante encantamiento vital-, que es la gigantesca prueba de que no acaban de darse cuenta que la mayor defensa de un sistema social está en las fuerzas de la cooperación, la belleza y la alegría. Cuando estos aspectos se menosprecian y se debilitan en un país como EEUU, el final de su grandeza comienza a servirse en el mismo instante en que sus ciudadanos toman el café diario y olvidan que mañana no es una simple palabra, porque mañana puede darse la extinción más completa que la historia pueda recoger sobre un imperio tan catastrófico para la civilización como lo es EEUU.
* Andrés Marí es escritor, profesor y actor cubano residente en Catalunya.