Importe o no la fecha el 2 de Noviembre de hace 100 años se hacía firme la Declaración Balfour: Inglaterra, su gobierno, su monarquía, se compromete con el financiero estafador y aprovechador de todas las guerras, Rothschild, a instaurar o instalar en su territorio insular las oficinas centrales de lo que debe llamarse Estado sionista de Israel.
Según ACNUR y la Organización Internacional de las Migraciones, en los últimos siete meses más de 600.000 sirios han regresado a sus hogares. De ellos varias decenas de miles lo han hecho desde Líbano, Jordania, Turquía e incluso países más lejanos. El dato es indicativo de un cambio de tendencia en Siria resultado de los éxitos militares del Ejército regular sirio sobre el terreno y los procesos de Reconciliación Nacional lanzados por el Estado.
Las medidas políticas a veces se dan la vuelta. El gobierno estadounidense, gerente del emporio militar, económico y financiero, instrumentalizador de esa su historieta del “destino manifiesto”, por no compartir nada con la Humanidad no comparte ni el bloqueo a Cuba. Dicho de manera más justa, el Mundo no comparte con ese gobierno de multimillonarios el bloqueo a todos los niveles de la existencia, a ese pueblo que gobierna la isla de Cuba.
Estamos en el curso de la Historia al que nos empujaron desde la Conferencia de Madrid, (impulsada por EEUU al margen de las Naciones Unidas, 30 de Octubre-1 de Noviembre de 1991), que proponía que la solución a la ocupación de Palestina debía llegar mediante la relación de fuerzas y no por los principios de Derecho Internacional.
El Presidente Nicolas Maduro entró en la sala y fue directamente a saludar a la prensa y a gobernadores y gobernadoras allí presentes que habían sido electos para sus cargos, un buen número de ellos y ellas eran muy jóvenes. Habían sido elegidos desde las bases populares por destacar en la defensa de los intereses comunes bolivarianos; la victoria sobre la oposición fue de 18 a 5, el 78 % de la representación gobernadora había sido asumida por la militancia chavista.
“Cuando en tus ojos me veo renace en mí la confianza de luchar por esta causa con sacrificio y esmero. Te ofrezco mi brazo artero y mi voz como una lanza. Mi pensamiento, mi canta y mi música vibrante, son par ti a cada instante, pues me colmas de esperanza”. Decima “Cuando en tus ojos”, de Fidel Barbito al Comandante Hugo Chávez.
Las relaciones entre Cataluña y el Estado que se quiere personificar como nación son antagónicas.