Gerardo Moyá Noguera*.- Al leer en un periódico digital me quedé estupefacto con la siguiente noticia: "En la plaza de elíptica de Madrid, todos los días, decenas de jornaleros urbanos sin papeles intentan conseguir unas horas de trabajo por unos miserables y pocos euros". Mi pregunta y desagradable sorpresa ante esta terrible barbaridad fue la siguiente: ¿Y qué hacen nuestros secretarios generales de UGT y CCOO? ¿No se presentan allí en señal de protesta y acaban con esta lacra de "empresarios" conocidos como "pistoleros" en el argot de la calle?
Estoy convencido de que si allí se presentarán no solo los secretarios generales y se manifestaran con sus afiliados, "otro gallo cantaría", como dicen. En el mes de noviembre pasado la brigada de extranjería del CNP junto con los agentes de inspección de trabajo, realizaron una redada justamente en la cafetería Yakarta y aseguran haber finalizado con este tipo de prácticas, pero desgraciadamente no ha sido así. Siguen y siguen los "pistoleros" haciendo de las suyas y contratando a los que pueden y les viene bien para cualquier trabajo. A todo esto se le llama explotación, pero mientras nuestros secretarios generales siguen en sus despachos como los políticos de turno, calentitos en invierno y muy cómodos en verano. Tal como si fuesen ganado los pistoleros-empresarios una vez "contratados" por sus labores los meten en una furgoneta y al curro, sin seguridad social, pocos sueldos, etc.etc. y después que no me hablen de esclavitud, porque esta sigue ahí más presente que nunca. Hablemos de un ciudadano senegalés llamado Nashib que lleva más de cuatro años en España, sin trabajo y sin poder haber conseguido regularizar su situación. Dicho ciudadano senegalés, en su día de "gloria" le pagaron 40 euros que al final se quedaron en 20 euros ya que los "pistoleros" le dijeron que los otros veinte se los quedaban por los costes del viaje, gasolina, etc. Pasen y vean, por favor.
*Presidente de la Casa de Amistad Baleares-Cuba