Por Lazaro Fariñas*/Foto Virgilio Ponce -Martianos.- Más lento que una tortuga, o como dicen en España, más lento que el crecimiento de una berza, el Presidente Joe Biden está moviendo la política hacia Cuba en la dirección correcta.
Ha levantado las restricciones de las remesas, ha permitido el aumento de vuelos comerciales a La Habana y a las provincias cubanas, ha permitido que los norteamericanos viajen a la isla en grupos en los famosos viajes de Pueblo a Pueblo y en viajes académicos y científicos, dentro de unos días se reabren los servicios consulares con los que se elimina que los cubanos tengan que ir a Guyana para buscar una visa, mandó algunos equipos para ayudar con el fuego de la Base de Tanqueros de Matanzas, donaron dos millones de dólares para la recuperación de los daños ocasionados por el huracán en Pinar del Rio, ridícula cifra, pero lo importante es el gesto, y así lo agradeció la dirección cubana.
Estos pasos, más lo que debo desconocer por ser secretos y otros que seguirán llegando a medida que pase el tiempo, me imagino que van a desembocar en una relación un poco más cordial entre los dos países.
Tres cosas a recordar: es mejor tarde que nunca; es mejor poco que nada, y nunca es tarde si la dicha es buena.
*Lazaro Fariñas, periodista cubano, residente en EEUU.
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