Gerardo Moyá Noguera*.- ¿Quién manda  en el mundo? Los oligarcas, o sea, un pequeño pero poderoso clan de personas selectas  y que no son demócratas, como por ejemplo el G-7. Son los que dirigen la  gran noria del mundo terráqueo. Pero ¡ojo! hay países como por ejemplo Cuba, Venezuela etc. que no se dejan manipular por estos señores, algunos son señores de la guerra, como pueden ser Trump y su más fiel discípulo Biden. De ahí surge el gran dilema de o estás conmigo o en contra. Este es el gran problema existente en el mundo de hoy. .

Y si le añadimos a este dilema los componentes o afiliados de los partidos políticos y sus asesores todavía más. Ellos son, a mi juicio, los muñidores del anti-parlamentarismo, que cuando entran en el hemiciclo no dejan a nadie insatisfecho. ¿Cómo podría llegarse a una solución más, digamos, educada? En primer lugar, estoy plenamente convencido, leer sobre todo filosofía antigua y por otra parte apartar de una vez  por todas, de quien la dice más brutal, teniendo en cuenta la oratoria, sus "méritos" suben en sus propias filas, enalteciendo a dicho personaje. Cuando digo leer filosofía antigua me refiero al hecho de leer y no solamente convertir la política en un lugar privilegiado económicamente al salir de la universidad. Esta debería ser un lugar donde se pueden enseñar o deberían enseñar para el futuro tener o adquirir un comportamiento más suave en las formas y más elocuente en la práctica. El parlamentarismo siempre  ha sido un poco exaltado en las formas, pero lo que vivimos hoy día no es para nada exaltación ante los demás, sino una descalificación brutal hacía el otro. De ahí surge la extrema derecha, que "gracias"  a algunos trabajadores/as y junto con el PP podría ser que en las elecciones generales tuvieran mayoría en el congreso de los diputados/as.

Estamos hartos del " y tú más", que es lo que también prevalece en el Congreso y en cualquier parlamento autonómico.

Si esto sucediera creo que algunos/as ya pueden preparar sus maletas e irse a  otro país, mejor Cuba donde no hay oligarcas y la dictadura del proletariado es un hecho y un derecho.

*Presidente de la Casa de Amistad Baleares-Cuba