Andrés Marí - Cubainformación / Fundació Vivint.- La farsa judicial contra el independentismo catalán maneja su show mientras los acusadores van con su ley y los acusados penetran en sus grietas. Creen los acusados y sus defensas que las han hallado para exigir la absolución, y creen los acusadores y sus testigos que si han aparecido es porque al mismo tiempo que hacen invencibles los postulados de los acusados, también hacen invencible la calidad del Sistema. La absolución o la condena dependerá del arreglo que dignifique la ley capital: en el Sistema no hay grietas, sino Libertad, Democracia y un Estado de Derecho acorde con el ejemplar paradigma capitalista.

Andrés Marí - Cubainformación / Fundació Vivint.- Las locuras en que se involucra la actual administración norteamericana pueden llevar a la pronta caída de esa nación de nacionalidades donde el mundo se cita para hacerla más humana. Tal vez los cubanos que viven allí puedan hacer algo para evitarla. ¿O es que nos dividimos en anti-imperialistas e imperialistas? Mi respuesta es un NO rotundo. ¿Quiénes entonces son los imperialistas?, porque Trump y sus allegados solo son aves que al sistema le convino echar a volar. Los imperialistas son los repitientes del “America first, and only America first”.

Andrés Marí - Cubainformación / Fundació Vivint.- China ya está a punto de inaugurar el puente más grande del mundo sobre el mar, y esto ha despertado en algunos un comentario aludido a Napoleón: “El día que China despierte, temblará el mundo”. No creo que debamos darle mucha importancia al despertar chino como para que todos temblemos. Imagino que alguien también dijo algo semejante sobre las 13 colonias norteamericanas.

Andrés Marí - Cubainformación / Fundació Vivint.- Parece que los virus de la ley son los ases de triunfo en los actuales conflictos del Reino de España. Así debe pasar en muchos otros países donde la mayoría de sus ciudadanos acuerdan que sea la ley -en definitiva todavía defectuosa y que no sabe dónde están los antídotos contra sus virus-, la solución para la alegría general. Es la ley la que salva al mundo de la jungla, aun cuando ella misma no sabe todavía cómo salir de ella o cómo realmente unos se esconden con ella para que otros la padezcan. Quizás por ello la ley se ha vuelto tan irreverente con millones de personas que la esperan para vivir como iguales en nuestro querido planeta que, repleto de los virus de la ley, se está volviendo inhabitable.

Andrés Marí - Cubainformación / Fundació Vivint.- Antes, no muchos años atrás, en las estaciones de trenes y Metros de Barcelona había policías que cuidaban del orden público y otros asuntos; ahora eso está en manos de empresas privadas que hacen lo que hacen. Igual pasaba en otros sitios, entre ellos los aeropuertos, en que ya reina la competencia entre empresas privadas de seguridad con experiencias anteriores en el sector público. También pasa con los teléfonos de numerosas dependencias gubernamentales, entre ellas el Paro y Hacienda, pero también con hospitales y otros centros públicos que ya no tienen la numeración normal y a la que ya no podemos llamar con el pago de nuestra telefonía en la casa, pues ahora tienen una especial de pago extra. Y para que crezca el precio están unas máquinas que pueden hacerte esperar una eternidad, pues hablar con alguien es como hallar a un marciano.

Andrés Marí - Cubainformación / Fundació Vivint.- Si se logar detener la fuerza de la muerte en Venezuela, se salvará la belleza de la vida del pueblo venezolano. Hoy se premia en España al Museo del Prado y se recuerda la evacuación de sus pinturas durante los bombardeos a Madrid por parte de un señor guerrero. Así, la más grande colección de obras de Velázquez, Goya, Tiziano, el Bosco, Rubens, el Greco y tantas otras de Caravaggio, Veronese, Tintoretto, Van Dyck y otros maestros de la riqueza pictórica se salvaron de la barbarie de la guerra. ¿Qué hay que salvar en Venezuela? Quizás su esfuerzo nacional con las orquestas sinfónicas en los barrios más humildes que tocan a Bach, Beethoven, Chopin, Schumann, Brahms. ¡Ay, y a los miles y miles que los escuchan!

Andrés Marí - Cubainformación / Fundació Vivint.- El juicio contra el independentismo catalán es muy claro: no se le aplicará cualquier ley, sino la que debilite su fuerza y lo diluya. Al independentismo no se le juzga por exigir un voto democrático o por un juego con los símbolos, sino por levantarse como pueblo: un grave delito para los amos de las finanzas y de la ley que dirigen el Capitalismo. El conflicto no es el voto, sino que los pueblos decidan lo que el Sistema no ha calculado para ellos. Así pasó con el referéndum en Grecia a raíz de su crisis económica en que, por celebrarlo sin el aval de la Unión Europea, el pueblo griego fue más castigado. Por ello Catalunya, si conviene al Sistema como convino en Grecia, puede ser llevada a su anterior estadio silencioso empujada por la ley.